En la actualidad, todo el mundo sabe que estamos viviendo en un momento de crisis económica y que cada vez más tiene un serio papel en el mundo del deporte de competición. Antes de que llegara a nuestro país esta situación, todo deportista tenía un material de alto nivel y ni pensaba en no ir a alguna competición que se alejara de su país natal. Sin embargo, ahora, aunque continúan teniendo un material bueno y competitivo con el resto de participantes, su uso es más prolongado y piensan con más antelación el presupuesto que tienen para viajar para competir en otros lugares del mundo.
Teniendo en cuenta el tema de las competiciones, a nivel popular, en cuanto que supone pagar para competir, no todas las personas aficionadas a deportes como el triatlón o la natación pagan por ello, ya que no se lo pueden permitir. En definitiva, practicar cualquier deporte es caro y aún más si necesita un material específico para practicarlo.
Ya que el tema de hoy tiene que ver con la crisis, es importante destacar que el deporte y la crisis no siempre van relacionados con el material y el precio de competiciones y viajes, ya que simplemente, personas con una vida saludable, hacen deporte cada día para afrontar estos momentos de crisis.
Mientras que alguien hace deporte consigue desconectar de la vida cotidiana y de los problemas que tengan que afrontar, por ello aunque no haya dinero para competir cualquier persona puede coger unas zapatillas y salir a correr un rato.
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